El ayuntamiento de Iruñea, encabezado por Navarra suma y con la colaboración del PSN, quiere hacer desaparecer de un plumazo más de 20 años de trabajo comunitario en los barrios con la infancia, la adolescencia y las familias. El trabajo de los 8 SAPCs (Servicios de Acción Preventiva Comunitaria) se ve atacado de nuevo. Pretenden cambiar un modelo de 24 trabadores/as y más de 400 personas voluntarias, por otro de 14 trabajadores nuevos/as, sin referencias ni redes comunitarias en los barrios.
Mientras en el pleno se aprobaba lo que se ha denominado “la venganza con los barrios”, estos han respondido en la calle.