Más de 3.000 personas marcharon, el pasado sábado desde la Plaza de España hasta la Puerta del Sol, en la que fue la etapa final de la Marcha por la Libertad del Pueblo Saharaui. Tras haber recorrido gran parte del territorio peninsular a través de 12 columnas que salieron hace casi un mes de distintos puntos de su geografía, el pueblo saharaui ha llevado hasta el centro de Madrid sus reivindicaciones:
- Visibilizar la lucha del pueblo saharaui.
- Denunciar la ocupación genocida marroquí, el expolio de los recursos naturales del
pueblo saharaui y las violaciones de los DDHH en los Territorios Ocupados del Sahara Occidental.
- Exigir a la ONU, a la Unión Europea y al Gobierno de España que culminen el proceso de descolonización y se ponga fin a la impunidad con la que Marruecos vulnera constantemente la legalidad internacional.
La iniciativa nació como una acción directa no violenta para dar visibilidad a la lucha del pueblo saharaui y concienciar de la situación de emergencia en la que viven, tanto a los diferentes grupos políticos como a la población. Una situación de tortura y opresión a la que llevan sometidos 45 años, casi medio siglo, y cuya gravedad es mayor desde que Marruecos rompió, el pasado 13 de noviembre, el alto el fuego.