Convocadas por el Movimiento Feminista de Nafarroa, hoy se han celebrado diversas iniciativas con motivo del Día Internacional de la Mujer Trabajadora. Han denunciado que este sistema capitalista y patriarcal vulnera los derechos de las mujeres, y han tenido en cuenta especialmente la cruda situación de las mujeres racializadas, muchas veces sin papeles y oprimidas en tareas de cuidado.
Por la mañana, se ha realizado una concentración en la oficina de Extranjería para denunciar las fronteras, los muros y las políticas migratorias. ¡Los muros y las fronteras matan!
Poco después ante la ante la residencia Amma Oblatas, se han concentrado para denunciar que los cuidados no pueden ser un negocio. Esta crisis sanitaria ha dejado al descubierto la cruda realidad de la atención residencial, que no es cíclica. Hay que acabar con esta realidad. Corresponde al conjunto de la sociedad navarra hacer frente al abandono de las instituciones de este sector.
Detrás de estas condiciones laborales y de vida está la avaricia de quienes entienden nuestra salud, nuestros cuidados, como un negocio; está la responsabilidad política de los gobiernos que, más allá de permitirlo, apuestan por este modelo de negocio.
A continuación, una marcha ha recorrido las calles de alde zaharra, para acabar en la plaza del ayuntamiento de Iruñea donde el Movimiento Feminista de Nafarroa ha mostrado públicamente los “trapos sucios” del equipo de Gobierno de Enrique Maya, como los ataques al 0-3 años, al euskara y a los servicios de prevención de los barrios. Al tiempo que le pedian menos lazos morados y más dinero para los cuidados.
¿de qué nos sirven sus lazos morados si después desatiende la infancia y los barrios, si desmantela y privatiza los recursos públicos, si cierra y criminaliza a los equipos de prevención? Estamos hartas de su simbolismo institucional.
Posteriormente se han acercado a la sede del Legislativo navarro, ante cuya puerta principal han desplegado una pancarta en la que se podía leer “Feminismotik dena aldatu sistema arrakalatu”.
En este acto se ha leído un comunicado en el que se denuncia que mientras dentro de este edificio se les llena la boca con discursos vacíos y sin contenido que no mejoran las condiciones de vida de las personas, las feministas llevamos meses desde las calles, poniendo encima de la mesa que garanticen una vida digna para todas.
Mientras se desplegaba la pancarta, para encadenarse a los barrotes de algunas de las ventanas bajas con las que cuenta la fachada del inmueble, siendo posteriormente soltadas por efectivos de la Policía Foral que han cortado las cadenas.
Agentes de Policía Foral han empujado a las personas que portaban la pancarta para llevarlas hasta el otro extremo de la carretera, lo que ha generado numerosas protestas, durante las que Policía Foral ha detenido a una mujer.
